Khajuraho

Desayunamos en el hotel y emprendimos el viaje hacia  Khajuraho que se encuentra a 172 Km. de Orcha. En el trayecto cruzamos la ciudad de Chhatarpur y algunos pueblos donde había animados mercados. La circulación en la carretera no es muy rápida debido a su estado. Nos encontramos con un tramo de la calzada en obras, esto demuestra que poco a poco van arreglando cosas. Llegamos a Khajuraho a la hora de comer.

Khajuraho con 10.000 habitantes es la antigua capital de la dinastía rajputa de los Chandela,  crearon este reino entre los siglos  X y XIII. Durante este periodo construyeron los templos que representan un magnífico ejemplo del arte indoario (nagara). En otros tiempos, sobre esta llanura árida había 85 templos, en la actualidad solo quedan 22 de ellos. Este conjunto arquitectónico quedó escondido entre la maleza hasta que fue descubierto por los británicos a mediados del siglo XIX. En 1986 la Unesco lo declaró Patrimonio de la Humanidad.

Existen tres grupos de templos, pero los más conservados y visitados son los del grupo Oeste. En un magnífico entorno natural se pueden contemplar la gran cantidad de figuras y relieves esculpidos en las paredes de los templos. Es admirable el trabajo de las esculturas y la riqueza de detalles. Las escenas principales tratan de temas de la vida cotidiana de reyes, reinas, divinidades, guerreros y hermosas mujeres. La lujuria, el aseo, las recepciones, evocan ceremonias íntimas o públicas, siempre con un toque de humor, de ironía y de burla.

En cuanto a las escenas eróticas no se conoce con exactitud sus significados. Naturalmente, se piensa en el Kama sutra, ese célebre tratado de erotismo que data de los siglos IV al VIII.
Según la cultura tántrica, las escenas de amor representan el olvido de uno mismo, la abolición del tiempo y como consecuencia el mejor modo de meditar. El individuo entra entonces en una fase de negación de su ego, según la cual está en condiciones de sentir el poder divino.

Casi todos los templos responden a los mismos criterios arquitectónicos: un porche de entrada, un gran recibidor, un vestíbulo y una especie de celda. Los pilares, los dinteles y los techos están bellamente esculpidos.

En el exterior las torres, las shikharas, se alzan a diferentes alturas pareciendo montañas compitiendo entre ellas. La superficie exterior y mas alta de las torres de los templos están cubiertos de paneles esculpidos, que recuerdan a un nido de abejas.